1- ¿Hay que cambiar algo? , no hay problema. La mayoría de proyectos tienen una debilidad en la definición del alcance la cual es en muchos casos un poco vaga y los patrocinadores no tienen una idea clara de que es lo que quieren lograr con el proyecto.
2- ¿Podemos hacer espacio para una actividad más? Los jefes de proyecto normalmente no crean un programa practico, sino que tratan de complacer a los patrocinadores en sus deseos de lograrlo en menor tiempo, subestimando que tanto tiempo tomará y ajustando el programa para acomodar los contratiempos en vez de crear un programa realista.
3- Para qué hacer gestión de riesgo? Los riesgos potenciales no son identificados ni gestionados desde el inicio del proyecto, lo que aumenta la probabilidad de que algo salga mal en el proyecto.
4- ¿Pero teníamos un plan?. Muchos gerentes de proyecto no tienen suficiente control para gestionar los cambios del proyecto, ni cambiar, aumentar o disminuir los recursos a medida que se vaya necesitando.
5- No lo podemos hacer sin ti – mentira!!. Los miembros del equipo deben sentir que su trabajo es valorado y que el gerente de proyecto los involucra. Si ese no es el caso, no se sorprenda cuando su equipo se le revele.
6- ¿Y donde se fué mi equipo? Esto ocurre cuando el gerente de proyecto NO asegura los recursos y el apoyo de la alta gerencia oportunamente, entonces los recursos son reasignados a otros proyectos.
7- ¿Los ejecutivos siguieron adelante? El apoyo de la alta gerencia es retirado ya que no se mantuvieron suficientemente involucrados e interesados en los resultados del proyecto.
8- ¿Podemos acelerar? En organizaciones jerárquicas, las largas esperas de aprobaciones pueden retrasar los proyectos.
9- Mío, Mío, Mío!!!. Los gerentes de proyectos se atosigan y empantanan en los detalles del proyecto y no delegan.
10- ¿No te dije eso ya? Todos los interesados del proyecto deben de mantenerse informados de los resultados del proyecto a medida que se va desarrollando.
Excelente
Gracias Fabio, Saludos!!